La Fundación Almastur, presidida por el músico Carlos Rubiera, es una entidad que tiene entre sus fines el estudio, investigación, enseñanza, divulgación, promoción y defensa de la cultura asturiana en todos sus aspectos y manifestaciones, tanto patrimoniales como de nueva creación.

Para el diseño de su identidad gráfica me inspiré en la tradición de asociaciones como Conceyu Bable y en detalles vinculados a la escritura en asturiano o la música. El polisquel se forma a partir de sutiles detalles como el apóstrofe o la clave de sol, logrando una imagen propia, identificativa, vinculada a la tradición simbólica asturianista y, a la vez, adaptada a nuestro tiempo. Los tonos azules y dorados seleccionados remiten a la enseña asturiana, mientras que para la tipografía me decanté por una serifa con diferentes pesos.